rasgadura

Falda larga transformable en vestido, con sistema de lacitos que permite ajustar largo y ancho. Presenta una experimentación textil que evoluciona con el uso: una rasgadura que cambia con el tiempo.
 
 
La pieza habita ese instante previo a ser nombrado, cuando el cuerpo aún es posibilidad. Inspirada en el poema de Laura Gilplin que imagina a una criatura en el instante previo al juicio: viva, acompañada, mirando el cielo duplicado antes de ser nombrada.
 
Rasgadura existe antes del juicio, bajo un cielo que parece duplicarse. El gesto de rasgar no es ruptura, sino apertura: una forma de dejar que el tiempo, el movimiento y la experiencia escriban sobre la prenda nuevas maneras de amar y de estar.